Durante las últimas semanas, se ha tenido conocimiento gracias a la grabación de conversaciones telefónicas entre un consejero presidencial y responsable de los servicios de Gastroenterología de uno de los principales hospitales de Lima y ejecutivos de una clínica privada, sobre posibles convenios que implicaban un uso indebido de la tercerización de servicios, utilizando los fondos del Seguro Integral de Salud. En las conversaciones se menciona un convenio con el Arzobispado de Lima que, si bien no llegó a hacerse efectivo, involucraba a determinados funcionarios de la institución eclesiástica. A raíz de ello, la Conferencia Episcopal emitió el siguiente comunicado que damos a conocer.
COMUNICADO
Los obispos de la Presidencia de la Conferencia Episcopal Peruana profundamente preocupados con lo que se ha conocido recientemente sobre el Sistema Integral de Salud, a raíz de algunos audios publicados por los medios de comunicación, queremos manifestar lo siguiente:
- Nos causa estupor y extrañeza la intención de utilizar la suerte de los pobres y enfermos y de las instituciones eclesiales para un beneficio particular.
- Negociar con la suerte de los pobres y de los que sufren va contra el corazón del mensaje de Cristo, contra las enseñanzas de la Iglesia y contra las enseñanzas y el testimonio del Papa Francisco.
- Exigimos una investigación seria y transparente para conocer toda la verdad, por el bien del pueblo de Dios y por la confianza en las instituciones de salud. Pedimos a la feligresía católica dar la debida atención para que algo así nunca más vuelva a suceder.
- Conviene recordar que en la Iglesia Católica las jurisdicciones eclesiásticas son autónomas, no dependen del Arzobispado de Lima, sino directamente del Santo Padre. La Conferencia Episcopal es el ente de coordinación pastoral, de colegialidad y de comunión.
- Reafirmamos el servicio solidario de salud que La Iglesia Católica, viene desarrollando desde muchos años atrás, en colaboración con el Estado, para la atención de los más necesitados. Esta labor encomiable de la Iglesia, no debe verse perjudicada ni empañada por personas y/o funcionarios que no tienen el criterio de ayuda, que sí tiene la Iglesia.
- La Iglesia Católica no lucra de ninguna manera con el servicio de salud ni con los servicios de común interés que presta a la comunidad entera, a partir del Acuerdo de mutua colaboración que tiene con el Estado Peruano.
- Finalmente, queremos afirmar que La Iglesia ha estado y seguirá estando siempre al lado de los pobres y de los enfermos, al ejemplo de Nuestro Señor Jesucristo.
Lima, 13 de octubre de 2016
Fuente: http://www.iglesiacatolica.org.pe/