Ha fallecido el P. Jorge Álvarez Calderón
Su partida deja un gran vacío
pero un hermoso testimonio
El 10 de julio recibimos la triste noticia del fallecimiento del P. Jorge Álvarez Calderón, tres días después de haber cumplido 90 años.
Su larga trayectoria como sacerdote diocesano deja un gran vacío pero también un valiosísimo testimonio de entrega generosa, de cercanía sencilla y alegre con los más débiles, de convicción inquebrantable en la lucha por la justicia y la dignidad de toda persona.
Fue asesor del Movimiento de Trabajadores Cristianos que él fundó hace más de 50 años y más recientemente de la Comunidad Laical del Prado. Acompañante fiel de muchos sacerdotes diocesanos en todo el país, tuvo también un relación estrecha con la Comunidad de Sacerdotes del Prado.
Amigo y acompañante de tantas comunidades, nos deja el regalo de su vida y su amistad.
Gracias Jorge porque siguiendo a Jesús has vivido haciendo el bien con libertad y alegría.
Juan Josè Ahern
Jorge para nosotros los sacerdotes extranjeros fuiste un faro guiando no’s con su sabaduria y ejemplo . Tu entrega al pueblo tu honda espiritualidad marcaron tu camino. Que tengas la plenitud de la vida en la Casa del Padre.
Gracias por todo
Juan Josè Ahern
JOSE LUIS
P. JORGE PARA MUCHOS SACERDOTES DIOCESANOS SERAS SIEMPRE UN EJEMPLO DE AMIGO, HERMANO Y PASTOR NOS DEJAS UNA GRAN TAREA SEGUIR ACOMPAÑANDO A NUESTRO PUEBLO ESPECIALMENTE A LOS MAS POBRES. GRACIAS POR TODOS TUS CONSEJOS Y ADVERTENCIAS.
César Augusto Barahona Calderón.
Gracias Jorge Álvarez-Calderón, por tu vida, por tu testimonio, por los inicios de la Liberación teológica y pastoral, y por tu intuición hacia la vida contemplativa y monástica en medio de los empobrecidos(as)(es) desde tus conversaciones en Lovaina con André Jacobs (osb). Falleces ad-portas Fiesta de San Benito de Nursia. Que Dios nos siga mostrando el Misterio de la Resurrección incluso en los momentos más confusos o menos comprensibles como estos.
P. Emilio Farrell
Jorge fue mi modelo a seguir. Me ayudó varias veces entender situaciones de la vida. JAC, como el se acostumbró a firmar su nombre, siempre aparecio en cualquier parte del país cuando había situaciones tensas para ayudar nosotros sacerdotes reflexionar y llegar a un comportamiento prudente. Recuerdo de una visita que hice a hablar con Jorge en su “hogar”. Fue un cuarto muy sencillo encima de una capilla. Tenía una cama, una silla y una estante con algunos libros. Era como una celda en un monasterio. GRACIAS Jorge, por su alegria, su animo y su liderazgo, Padre Emilio Farrell
POCHO PANTERA
GRACIAS padre Jorge por tu amor sl pobre, al pueblo., gracias por que te despojaste de la riqueza para vivir como Jesús inspiraba. Amén.